Las “4 S” de la seguridad del casco de moto

El casco es un sistema de seguridad pasiva indispensable que puede salvar vidas y reducir la severidad de las lesiones en caso de accidente. Para garantizar su efectividad, existen cuatro principios clave, conocidos como las “4 S” del casco, que todo motociclista debe tener en cuenta:

1. SELECCIÓN / Elegir casco adecuado:

Es fundamental seleccionar un casco que cumpla con las normas de seguridad, que sea de la talla exacta para ajustarse correctamente a la cabeza, garantizando que sea un casco certificado.

2. SUSTITUCIÓN / Cambiarlo en el momento indicado:

Los cascos tienen una vida útil limitada y deben ser reemplazados periódicamente, incluso si no han sufrido daños. Si el casco presenta daños visibles, como grietas o abolladuras, debe ser sustituido inmediatamente.

Un casco que ha sufrido un impacto, incluso si no presenta daños visibles, debe ser retirado y reemplazado, ya que su capacidad de absorción de impactos podría haberse visto comprometida.


3. SUJECIÓN / Ajuste correcto:

Es fundamental que el casco se ajuste correctamente a la cabeza y que la cinta de sujeción esté bien abrochada para evitar que se mueva o se caiga durante el uso.


4. SANITIZACIÓN / Limpieza:

Mantener el casco limpio y libre de suciedad es importante para garantizar su buen estado y evitar la proliferación de bacterias.

En la Semana Mundial del Motorista, El Departamento de Tránsito de la PNC recuerda a los motoristas que pilotos y pasajeros deben utilizar casco protector certificado y equipo de protección personal para minimizar las lesiones durante accidentes de tránsito.